Mirando el cielo [Libre]

Estava en el patio sin saber que hacer, eso era puro aburrimientos, habia varias chicas mas dando vuletas por el patio sin saber que hacer, vaya mierda de vida. Fue caminando por el patio sin saber a donde ir ni saber que hacer, pues era basicamente cemento, en un lado del cemento habia lo que parecia ser un poco de cesped. Asi que me levante de las banquetas y me dirigi a ese cesped que habia alli.

Me tumbe en cima del cesped mirando el cielo, pensando en que seria de sus padres y su hermana ahora que ella no podia ayudarles a cosneguir comida ni nada, esperaba que estuvieran bien. Cerro lo ojos y se puso a pensar en sus cosas sin hacer mucho caso a lo que pasaba a su alrededor. Pues como no habia apenas presas en esa prision aun no tenia de que preocuparse.

Abrio los ojos miro a su alrededor y echo la vista al cielo, mirando como las nueves pasaban lentamente y los pajaroes reboloteavan por el cielo.

Nunca había odiado su trabajo, para ella la disciplina era fundamental en la vida de toda persona, y aunque ella no lo aplicara de la mejor manera el hacerlo ver a aquellas chicas era esencial para ella, las mujeres en aquel lugar eran vagas y muchas eran bastante vulgares, cosa que no le gustaba mucho a Xena, aunque bueno no había mucho de que quejarse después de todo ella también era algo...alocada fuera de la prisión.

Aquel dia no habia mucho que hacer, el cargamento de reas nuevas no arribaria hasta dentro de dos semanas, lo que le daba tiempo suficiente para hacerse mensa mientras vigilaba a las pocas que habia en el lugar; sus pazos eran pausados pero se escuchaba en aquel lugar solitario el eco de sus pisadas con las botas. La verdad el uniforme de pantalón era el que mas le agradaba los otros eran para ella en exceso exagerados y aunque a veces tuviese que usarlos prefería aquel que llevaba en ese momento. A lo lejos del patio diviso a una chica tirada en el césped, se pregunto si la mujer estaría bien, no le sorpenderia que tuviese alguna herida después de todo los pleitos ahi eran constantes. Se acerco levemente hasta la chica y tapo la vision de esta, con su rostro serio la miro a los ojos esta bien ? su voz era suave y ronroneante pero a la vez enérgica y sensual.

Estaba mirando el cielo, y pensando en mis cosas, cuando de repente una sombra se posa ante mi tapandome el sol y la vista, echo la mirada hacia arriba y veo una guardia mirandome - Si solo contemplava el cielo - digo sin mucha importancia mientras sigo mirando me muevo unos pasos mas a la derecha para poder volver a contemplar el sol - Hoy hace un dia muy bonito, y como no hay nada mejor que hacer.... - añadio mirando a la guardia.

No la habia visto nunca por alli, talvez porque apenas llevava cuatro dias en la isla, seguramente abia mucha mas gente que aun no habia visto y se sorprenderia de ver.

Con una ceja levantada, típica expresión en su rostro, miro a la joven, supuso que tenia razón, en aquel lugar no había mucho que hacer por lo que mirar al cielo era de lo mas normal entiendo, creí que le había pasado algo, tenga cuidado...no la molesto mas saludo de forma típica con la mano sobre la frente, su expresión seguía siendo fría.

Se giro en sus talones y comenzó a caminar por el patio de nuevo, este estaba algo vació, y las pocas reas que estaban ahí preferían desviar la mirada de los penetrantes ojos de la mujer. Camino con las manos tras su espalda tomando su muñeca derecha con la mano izquierda, sus pasos seguían escuchándose con eco, hasta que se detuvo, levanto la vista al cielo y se quedo mirando este.

- Acaso le preocuparia que me ubiera pasado algo? - pregunte algo molesta, como podia una guardiana preocuparse por una presa. Se levanto y sigio a la guardia asta donde estaba - Eres nueva por aqui? - pregunto mientras se sentava en un banco que habia alli cerca y se la mirava.

Era algo distinta a las otras guardianas, aunque acababa de llegar a la isla y era la primera vez que estaba en un lugar como ese, no quiera ganarse enemigos - Soy Audrey - me presente mirando a la guardiana mientras le extenida su mano para presentarse

Sintiéndose observada su mirada dejo el cielo para concentrarse en la mujer que comenzaba ha hablar, la miro de lado ya que no movió su cuerpo, su mirada era serena al igual que su rostro serio me preocupa la seguridad de cualquiera de las reas, la verdad no se cual sea tu delito pero no falta quien disfrute matando a otra chica dentro de prisión, por lo cual tengo que revisar que todo este en orden se puso de frente a ella soltando sus manos para ponerla en sus caderas no, no soy nueva tengo bastante tiempo en este lugar extendio su mano para tomar la de la otra, claro que con mucha precaución pues con todo el armamento que llevaba en sus caderas cualquiera gustaría de engañarla para poder escapar, ya había pasado en otras ocasiones pero gracias a su entrenamiento ninguna había logrado mas que quitarle la macana y por lo mucho darle un golpe.

Generala Shira Firerunner estrecho su mano unos segundos para luego soltarla y ya que supongo no tienes nada mejor que hacer por que no me dices por que estas aquí metida con el nombre era suficiente para buscar los archivos y enterarse, probablemente eso lo haría mas tarde pero le daría el beneficio de la duda para que hablara, después de todo la mayoría estaba ahí para quedarse.

Le estrecho la mano a Shira con una sonrisa - Un placer - dijo mientras soltava la mano y se sentava en el suelo para contar su historia - Bueno pues veras, vengo de una familia muy pobre, asi que desde pequeñita e tenido que ir pidiendo a la gente limosna o cualquier cosa que me dieran para poder sobrevivir y traer comida a casa - dijo levantando la vista para ver a Shira Aunque a medida que crecia, la gente ya no daba las cosas asi como asi, sino que quiera algo a cambio - añadio mirando el suelo.

Un escalofrio recorrio su cuerpo en ese momento - Asi que en despues de varios años pasandolo mal, decidi empezar a robar, hacia muchos años que robaba, y nunca me habian pillado. Asta que un dia un cliente me vio y me delato, asi que empeze a correr, y me pergio un policia, otro me cogio y le cogi el arma y le dispare en la pierna para poder escapar - dijo suspirando - Solo habia cogido una barra de pan para darsela a mi hermana pequeña, no quero que tenga la vida que tuve yo - dijo mirandola

Mientras escuchaba la historia de la chica, Shira se ponía a pensar como era posible que gente como aquella terminara en un lugar como Lesbos, esta era una prisión para los mas altos delincuentes de la historia, y ella definitivamente no lo era, solo era una chiquilla ladrona con falta de dinero que había metido la pata y ahora estaba ahí por su mala suerte.

Miro en varias direcciones y se sentó en una de las bancas por un momento una lastima, por lo menos sabes o puedes contactar con tu familia? digo, despues de todo supongo que hay maneras...ademas aqui dentro puedes trabajar para mandarles dinero eso era verdad aunque los trabajos forzados eran una gran carga para todo aquel que estuviese en esa prision.

Miro com Shira se sentaba en una banca - No, llevo cuatro dias en esta prision y aun no se nada de nada de mi familia - dijo mirando el cielo y cerrando los ojos recordando a su familia - Pero bueno, espero que les vaya bien, yo intentare hacer todo lo que pueda para poder mandarles dinero... - añadio

- Y tu? Como llegaste a ser una Guadiana? - pregunto curiosa mirandola con una pequeña sonrisa mientras se sentaba en el suelo delante de ella. Y levantava la cabeza para mirar el cielo azul y como los pajaros y las nuves pasaban volando por alli

Un triste final para una chica que solo quería alimentar a su familia, el ver como chicas así terminaban en un lugar como aquel era algo incomprensible, era mal visto por la misma Shira el hecho de que personas que robaran tuviesen que estar presentes con otras mujeres que solo se encargaban de matar y violar, incluso a las mismas reas y comentarlo y difundirlo como si fuese algo de valor o una proesa...aunque bueno en aquel lugar probablemente si. Shira fijo su mirada en la chica para luego mirar al cielo soy entrenada de la fuerza militar de mi país, he estado en guerras y cosas así, la directora supo de mi talento y pago bastante dinero por tenerme aquí mira a la chica si quieres que te se sincera preferiría estar en una guerra y fuera de este lugar

Su mirada volvió al cielo al ver como pasaba una paloma blanca volando de extremo a extremo de la carcel que sea una guardia mandona y medio malvada no quiere decir que no tenga sentimientos, y es triste ver como gente como tu esta encerrada con gente como esa señala a una mujer que ella bien conocía era una asesina.

Mire al cielo y vi la paloma blanca volando por alli mientras se dirigia al extremo de la carcel y se perdia de vista - No quiero que sientas lasmita por mi - dije mirando a la chica mientras me tumbava en el suelo para seguir viendo el cielo - Es algo que hice por una necesidad mayor, hay gente que eso lo entiende y gente que no - añadi sin darle mucha importancia.

- Y si estubiste en la guerra, deves ser muy fuerte! - dije mirandola de reojo, y acto seguido alce la vista al cielo y cerre los ojos - Y porque aceptaste el trabajo? Si prefieres estar alli fuerta en una guerra? - le pregunte siguiendo con los ojos cerrados

Se puso de pie y observo con cuidado a las chicas que estaban al rededor, al parecer era hora de que las reas salieran de sus celdas por lo cual tenia que comenzar a moverse para vigilar a las chicas como dije antes, la Directora del lugar pago bastante por mis servicios, y como yo solo soy segunda al mando del ejercito el general me mando...ya sabes cosas de dinero...al final todos caemos ante su brillo se quito la boina y la puso en la banquilla.

Solo te pido que tengas cuidado, se que lo hiciste por necesidad a sabiendas de las consecuencias, pero las demás no están aquí por robar saco una liga de entre su ropa y se hizo una coleta alta, batallo un poco por su largo pero al final quedo de forma perfecta; tomo su boina y la acomodo dandole un aire juvenil y femenino a pesar de su porte regio bueno, creo que es hora de seguir con mi rutina se inclino hacia la chica y comenzó a caminar.


[disculpa la tardanza]

Escuche a la chica mientras me explicaba porque habia elegido quedarse alli, y la mire sorprendida, asenti con la cabeza, mientras ella en pie se hacia una elegante coleta. Se dio media vuelta y se queria marchar - Y ya esta? - dije algo decepcionada mientras me levantaba y la seguia - Me vas a dejar aqui sola? - añadi mirandola - Ahora que empezava a ser entretenido estar en el patio - dije mirando el cielo con los brazos detras de la cabeza
- Y dime... No te sientes muy sola sin un hombre a tu lado? - pregunte curiosa, Shira era realmente atractiva